Chile es una loca geografía con tanta diversidad de especies como de nichos ecológicos para su desarrollo y establecimiento, por lo que delimitar correctamente las unidades vegetacionales requiere un amplio conocimiento de las variables bioclimáticas.
En este sentido y en base al libro “Sinopsis bioclimática y vegetacional de Chile” a continuación, se nombran las 4 principales formaciones vegetacionales de la Región de Ñuble y las especies predominantes en cada una de estas.
El bosque caducifolio, donde predominan las especies de Nothofagus obliqua, Nothofagus pumilio, Nothofagus glauca, Austrocedrus chilensis, Azara alpina, Cryptocarya alba, y Persea lingue. El bosque esclerófilo donde predominan las especies Lithrea caustica, Lomaria hirsuta, Peumus boldus, Quillaja saponaria, Fabiana embricata. El bosque espinoso donde predominan las especies Acacia caven, Lithrea caustica. Y el matorral de baja altitud donde predominan las especies: Chuquiraga oppositifolia, Discaria articulata, Discaria Chacaye, Berberis empetrifolia.
No obstante, estas formaciones representan la poesía de la cubierta que posee el territorio, por lo que cada vez, van quedando menos vestigios de estas cubiertas, por lo que existe una categorización del estado de conservación de estas formaciones, además de la “representatividad” de los pisos vegetacionales en las áreas con protección oficial según la Ley Chilena.
En el caso de Ñuble, tenemos pisos vegetacionales con estado crítico de conservación, lo que, sumado al cambio climático, se hace necesario, analizar estas zonas y darle categorías de conservación, con el fin último de proteger el patrimonio natural de nuestra zona.
Como recomendaciones les dejo el libro “Sinopsis bioclimática y vegetacional de Chile” de Federico Lubert y Patricio Pliscoff y el disco “Aves de Chile” de Niño Cohete.