Personal de Gendarmería realizó un allanamiento sorpresa en tres recintos penitenciarios de la región de Ñuble, logrando la incautación de objetos prohibidos.
El procedimiento permitió requisar drogas, teléfonos celulares y armas blancas dentro del Centro de Cumplimiento Penitenciario de Chillán, el Centro Penitenciario Femenino de Bulnes y el Centro de Detención Preventiva de Yungay.
¿Quiénes participaron?
El operativo fue ejecutado por funcionarios de Gendarmería, con apoyo del personal de la Unidad de Servicios Especiales Penitenciarios (USEP) y guías del Equipo de Canes Adiestrados (ECA). La Directora Regional (s) de Gendarmería, coronel Emylyn Ibáñez González, señaló que la acción fue coordinada desde el Área Operativa de la institución y se enmarcó en el Plan Nacional de Seguridad Penitenciaria.
¿Por qué se realizan estos operativos?
Los allanamientos penitenciarios buscan evitar que internos posean elementos que pongan en riesgo la seguridad interna de las cárceles. En estos recintos, el ingreso de drogas, celulares y armas es una problemática constante, debido a que facilitan delitos como extorsiones, tráfico y agresiones dentro del penal.
¿Cómo ingresan los objetos prohibidos a las cárceles?
Los elementos incautados pueden ingresar a las cárceles a través de visitas, personal corrupto o lanzamientos desde el exterior. En Chile, se han detectado casos donde los internos reciben paquetes lanzados con drones o escondidos en alimentos y ropa. Por esta razón, Gendarmería realiza periódicamente revisiones y operativos para controlar estos ingresos ilegales.