Armas artesanales, teléfonos celulares y drogas incautó Gendarmería tras realizar un procedimiento al interior del Centro Penitenciario de Chillán (Región de Ñuble).
Según informó la institución, se realizó un allanamiento a toda la población masculina, tanto a condenados como imputados. Esto, con el fin de «fortalecer la seguridad, y pesquisar elementos y sustancias prohibidas.
El trabajo se realizó en coordinación con el nivel central de la institución. Se enmarca en las políticas de combate contra el crimen organizado que operan al interior de los distintos penales del país, así lo declara el Ministerio de Justicia a través de Gendarmería de Chile.
Juan Navarrete, director regional de Gendarmería, remarcó que «fue un procedimiento eficiente y fructífero donde se pudo incautar gran cantidad de elementos y sustancias prohibidas».
Esto «habla del buen actuar, profesionalismo y compromiso de los funcionarios de Gendarmería de Chile», aseguró quien dirige esa institución en Ñuble.
«Como institución estamos trabajando constantemente contra el crimen organizado y seguiremos ejecutando estos procedimientos. A través de estas acciones, se contribuye a minimizar los delitos que se pudieran cometer desde el interior de los recintos penitenciarios, contribuyendo así a la seguridad pública», aseveró el funcionario.
Hubo otro allanamiento a fines de 2022
Pero no es el primer allanamiento que se desarrolla en estos últimos meses al interior del Penal de Chillán. Hubo otro un día antes de Navidad, en el que el personal de Gendarmería revisó dos dormitorios del establecimiento penitenciario.
«Con el apoyo de la Unidad de Servicios Especiales (USEP) junto al Equipo de Canes Adiestrados (ECA), que lideraron el procedimiento, se logró incautar una serie de elementos prohibidos que afectan el normal funcionamiento de la unidad y ponen en peligro la integridad tanto a los internos como a los funcionarios«, había remarcado Navarrete en esa oportunidad.
