Tras la catástrofe de incendios forestales de febrero de 2023, la PDI de la Región de Ñuble anunció el despliegue de un equipo para perseguir a los autores de los siniestros. Sobre todo, de cara a la nueva temporada estival.
Se trata del Equipo de Investigación Preferente, con el que los detectives buscan esclarecer las responsabilidades penales relacionadas con los incendios forestales.
El jefe de la prefectura de Ñuble, prefecto Héctor Marín, resaltó la coordinación con diversas entidades como la Secretaría Regional Ministerial (Seremi) de Agricultura, la Corporación Nacional Forestal (Conaf), y el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred).
«Este año, hemos recibido 59 decretos del Ministerio Público, incluyendo órdenes de investigar los siniestros ocurridos entre el 23 de enero y el 29 de mayo, e instrucciones particulares. El trabajo de los detectives se encontrará abocado a la investigación criminal«, aseguró.
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La PDI también hizo hincapié en las graves consecuencias ambientales de los incendios forestales, que afectan no solo a la flora y fauna, sino también a la población humana.
Ante esto, el oficial superior de la PDI ha entregado una serie de recomendaciones cruciales. Entre ellas, están la importancia de denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con los incendios, proporcionando descripciones detalladas de personas, vehículos, y otros elementos relevantes.
Además, el prefecto Marín ha subrayado que la legislación penal no distingue entre incendios intencionales o por descuido, considerando ambos como delitos.
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En este sentido, ha hecho un llamado a la población para estar atentos a las restricciones de uso del fuego, especialmente en condiciones meteorológicas propensas a incendios.
Finalmente, la PDI de la región recalca la importancia de esta investigación preferente, no sólo para determinar responsabilidades, sino también para prevenir futuros desastres ambientales y proteger a las comunidades afectadas.
