Un taller participativo en la localidad de Minas del Prado, comuna de Coihueco (Región de Ñuble), promovió la valoración del patrimonio cultural y natural de la Reserva Nacional Los Huemules del Niblinto.
La actividad, organizada por el Departamento de Áreas Silvestres Protegidas (DASP) de CONAF Ñuble, convocó a vecinos, docentes, representantes comunitarios y autoridades locales.
El encuentro se realizó en la Escuela Guardia Marina Ernesto Riquelme y buscó rescatar elementos culturales a través de relatos populares transmitidos por generaciones.
Según el jefe del Departamento de Áreas Silvestres Protegidas de CONAF Ñuble, Mario Valdebenito, este tipo de trabajo busca impulsar “la gestación de un modelo de gobernanza para la reserva nacional y una futura actualización del plan de manejo bajo estándares abiertos”.
Lee también: Anuncian recursos para mejorar 100 casas dañadas por incendios del 2023 en Ñuble
La directora de la Escuela Guardia Marina Ernesto Riquelme, Jessica Valdés, destacó la importancia educativa de estas actividades. Señaló que este tipo de iniciativas permite que los estudiantes valoren la historia local y la transmitan a nuevas generaciones.
“Es importante que nuestros niños y niñas conozcan y valoren la historia del territorio y la puedan transmitir a las nuevas generaciones”, afirmó.
Relacionado: Ñuble tendrá 20 brigadas y 200 brigadistas para enfrentar temporada de incendios
Reserva Los Huemules de Niblinto
La Reserva Nacional Los Huemules del Niblinto fue creada en 1999 y cuenta con 2.022 hectáreas, ubicadas en el Corredor Biológico Nevados de Chillán–Laguna del Laja.
Este espacio combina ecosistemas como el bosque esclerófilo y el bosque templado, y alberga especies protegidas como el huemul, el puma y la güiña.
El Seremi de Medio Ambiente, Mario Rivas, explicó que la comunidad será clave en los desafíos futuros de la conservación.
“A futuro, tenemos el desafío de la implementación del Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas, que fortalecerá el trabajo participativo”, indicó.
Por su parte, Elizabeth Soto, representante del Centro General de Padres y Apoderados, pidió ampliar la participación en actividades similares. “Necesitamos conocer estas historias y transmitirlas a las nuevas generaciones”, comentó.