Un total de 2.137 kilogramos de carne y productos derivados no aptos para el consumo humano, fueron decomisados en la Región de Ñuble durante las recientes Fiestas Patrias.
Las fiscalizaciones, realizadas entre el 14 de agosto y el 18 de septiembre, estuvieron a cargo de la Seremi de Salud y detectaron problemas como pérdida de la cadena de frío, productos de origen no autorizado y materias primas caducadas.
En total, se llevaron a cabo 380 inspecciones en carnicerías, fábricas de embutidos, supermercados y las tradicionales ramadas, las que resultaron en 18 sumarios sanitarios y la incautación de productos en mal estado.
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Pérdida de la cadena de frío
«La principal causa de los decomisos fue la pérdida de cadena de frío, lo que vuelve peligrosos los alimentos para su consumo», explicó Paula Godoy, encargada de la Unidad de Seguridad Alimentaria de la Seremi de Salud.
Comparado con el año anterior, el número de fiscalizaciones aumentó en un 58%. Según datos del organismo sanitario, se habían realizado 241 controles.
«Nuestros profesionales se desplegaron por toda la región con un plan de contingencia, que contempló actividades de difusión y comunicación a la población«, aseguró la seremi Ximena Salinas.
Durante la tradicional celebración nacional, el consumo de alimentos típicos como empanadas y carnes para asados aumenta considerablemente. La demanda de estos productos, junto con el surgimiento de ventas temporales, genera mayores riesgos si no se cumplen las normas sanitarias.
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También se fiscalizó el delito de abigeato
Además del decomiso de productos cárnicos en las Fiestas Patrias, las autoridades también realizaron controles para impedir el robo de animales en la previa de dicha festividad.
Las inspecciones tuvieron como fin la acreditación de origen de los animales. Esto, para poder asegurar que los productos destinados al consumo cumplan con las normativas vigentes.
