Esta semana el Ministerio de Obras Públicas anunció una baja de $800 en el cobro del Peaje Agua Amarilla, en la Autopista del Itata. La ruta conecta a las regiones de Ñuble y Biobío; concretamente a Chillán con Concepción.
Posee una tarifa de $4.710 a autos y camionetas en horario normal. Con ese valor se convirtió en el peaje más caro del país.
Lee también: Evalúan ofrecer vuelos comerciales entre Chillán y Santiago: empresa visitará la zona
La baja de $800 se efectuará el 1 de julio. “La extensión de la licitación actual permitirá hacer una rebaja del peaje entre julio y agosto, rebaja hasta los $3.900“, aseveró la Ministra de Obras Públicas, Jessica López, en conversación con El Sur.
La secretaria de Estado agregó que la licitación se extenderá hasta el 2025 para llamar a una nueva, “de manera de tener los tiempos apropiados para preparar la nueva licitación que se estaría lanzando este año, con un proceso largo”.
Relacionado: Detienen a pareja en Yungay: traficaban drogas por encomienda
Críticas desde Quillón
Pero la medida no fue tan bien recibida por los alcaldes de las regiones de Ñuble y Biobío. Según recopiló BioBioChile, hay descontento en los jefes comunales porque, pese a la baja, la tarifa sigue siendo cara.
Así lo enfatizó el alcalde de Quillón, Miguel Peña: “Nosotros, al menos como comuna turística, nos sentimos presionados. Estamos encerrados por peajes, por ambos lados, dos peajes carísimos más dos alternativos que también se están cobrando”.
Sigue leyendo: Tras 15 años de espera, asfaltarán camino a La Balsa en San Fabián
El jefe comunal dijo lamentar que el Gobierno “no cumpliera su compromiso”. Esto, porque en 2022 el ahora exministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, había anticipado que en 2023 la tarifa quedaría en $2.900 pesos, lo que no se ha cumplido.
Al respecto, la ministra actual declaró que “uno siempre quisiera que fuera más barato, pero es lo que se ha negociado hasta la fecha y es una buena noticia“, añadió la ministra.