Un gendarme, con 24 años de servicio en la institución, fue detenido y formalizado por tráfico ilícito de drogas, cohecho reiterado e ingreso de celulares a la cárcel de Chillán (Región de Ñuble).
La Fiscalía de Ñuble, en coordinación con la Policía de Investigaciones (PDI), lideró el operativo que culminó con la detención del funcionario, quien quedó en prisión preventiva por los delitos imputados.
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La investigación comenzó en abril y fue llevada a cabo por la Fiscalía de Análisis Criminal y Focos Investigativos de Ñuble. El funcionario habría recibido drogas y celulares de familiares de presos, con quienes se reunía fuera del penal.
Según la Fiscal Regional de Ñuble, Nayalet Mansilla Donoso, “recibía droga y celulares de parte de familiares de presos, con los que se reunía fuera del penal”.
Los elementos confiscados en el casillero del imputado incluyeron 21,65 gramos de cocaína, 68,28 gramos de marihuana, 25 comprimidos de éxtasis, clonazepam, seis teléfonos móviles y $448 mil en efectivo.
En su vehículo se hallaron otros 6,07 gramos de cocaína. Además, un análisis patrimonial reveló depósitos sospechosos, entre ellos uno por $2 millones.
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Investigación apunta a bandas internas en el penal
El jefe de la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (Brianco), subprefecto Jonathan Silva Concha, explicó que el operativo fue denominado “El Patio del Poder”.
Según Silva, “desde el interior de la cárcel de Chillán existían dos estructuras criminales que operaban en coordinación con personas libres. Estas redes externas facilitaban la droga, mientras el gendarme actuaba como intermediario para ingresarla al penal”.
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En el mismo operativo, se detuvo a una mujer, acusada de entregar drogas al funcionario. La Fiscalía formalizó a la detenida por tráfico ilícito de drogas, tras incautársele pasta base. La imputada también quedó en prisión preventiva.
El Director Regional de Gendarmería, coronel Mario Palavecinos Castillo, señaló que el funcionario será desvinculado de la institución. Por su parte, el Juzgado de Garantía de Chillán otorgó un plazo de cuatro meses para la investigación.
Durante este tiempo, se espera formalizar a cinco internos vinculados a las bandas delictivas del penal. La audiencia para formalizar a los involucrados restantes quedó fijada para el 17 de enero.
