En prisión preventiva quedó un hombre de 36 años, acusado de los delitos de violación y aborto frustrado en perjuicio de su hija de 13 años en la comuna de Quillón (Región de Ñuble).
La medida cautelar fue decretada este jueves, 22 de agosto, por el Juzgado de Garantía de Bulnes, a solicitud de la Fiscalía.
El fiscal jefe de Bulnes, Rolando Canahuate Ronda, explicó que «solicitamos esta medida cautelar debido a la gravedad de los delitos, cometidos entre diciembre de 2023 y enero de este año, cuando la niña quedó embarazada. Y, además, por constituir la libertad del imputado un peligro para la seguridad de la víctima y de la sociedad».
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La investigación del caso está siendo llevada a cabo por la Brigada de Delitos Sexuales (Brisex) de la Policía de Investigaciones (PDI).
El subprefecto Iván Velásquez Medina, jefe de la brigada, señaló que «esta investigación es compleja y, por ello, detectives de esta brigada especializada han realizado distintas diligencias investigativas de carácter científico técnico, sumado a entrevistas, las que tienen carácter de reservadas por la naturaleza del delito, no obstante se mantiene una coordinación constante con la Fiscalía para continuar recabando antecedentes».
El tribunal otorgó un plazo de cuatro meses para que la Fiscalía y la PDI continúen con la investigación. Durante este tiempo, el imputado permanecerá en prisión preventiva.
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Los delitos
Este tipo de medida cautelar se dicta en casos donde la libertad del acusado representa un riesgo para la sociedad o para el proceso judicial.
La violación, según la legislación chilena, se refiere a la agresión sexual con penetración sin consentimiento, mientras que el aborto frustrado implica el intento de interrumpir un embarazo sin éxito.
